REFORMA ELECTORAL PERFECTA, LA.
¿Qué es un buen sistema electoral? ¿Cómo se compara con otros? ¿Cuáles son las virtudes del nuestro, si es que las tiene? ¿Y sus defectos? ¿Por qué vale la pena reformarlo? ¿Cuál es la mejor reforma?
Este libro propone una reforma que conserva lo bueno y corrige lo malo del sistema electoral español. Para ello, se analiza y explica de forma concreta, como una pieza que conecta a los ciudadanos con el gobierno. Lo que se debe conservar es el equilibrio entre la claridad de responsabilidad del gobierno y el pluralismo parlamentario; lo que se debe evitar es el sesgo político, más bien conservador y centralista, del sistema. Se propone un cambio a la vez continuista y drástico. Drástico por eliminar las provincias como distritos, un legado preconstitucional y preautonómico, y el mayor adversario de un sistema equitativo de representación, porque al eliminarse la desigualdad, el reparto de escaños entre partidos se vuelve más proporcional.
Se exploran
también otras alternativas razonables, para que el lector pueda juzgar cuáles
son mejores, desde el poco recomendable sistema alemán, según se argumenta en el
libro, hasta el mucho más recomendable sistema sueco.